Retinopatía del prematuro y riesgo de anomalías cerebrales estructurales en la MRI a término en bebés nacidos con ≤32 semanas de gestación
Shalini Roy, Laura Peterson, Beth Kline-Fath, Nehal A. Parikh.Investigadores del Estudio de Predicción Temprana del Neurodesarrollo Infantil de Cincinnati (CINEPS)
The Journal of Pediatrics
Determinar si la retinopatía del prematuro (ROP) se relaciona con anomalías cerebrales en la RM estructural a la edad equivalente a término en neonatos nacidos prematuros.
Reclutamos prospectivamente a 395 recién nacidos prematuros a las ≤ 32 semanas de gestación de cinco unidades regionales de cuidados intensivos neonatales de Cincinnati. Los lactantes elegibles se sometieron a pruebas de detección y diagnóstico rutinarios de retinopatía del prematuro según las pautas internacionales de detección a las 31 semanas de edad posmenstrual (PMA) o a las 5 a 6 semanas de edad (lo que ocurra más tarde). Se obtuvo una resonancia magnética estructural no sedada a las 39 a 44 semanas de edad postmenstrual. La lesión cerebral/anormalidad madurativa se cuantificó utilizando la puntuación global de anomalía cerebral de Kidokoro validada por un solo neurorradiólogo. Realizamos una regresión lineal múltiple para determinar la asociación entre la ROP y la puntuación de anomalías cerebrales, ajustando varios factores de confusión conocidos.
De la muestra regional de 395 recién nacidos prematuros, 134 (33,9%) desarrollaron retinopatía del prematuro. Entre los lactantes con retinopatía del prematuro, 19 (14,2%) desarrollaron retinopatía del prematuro grave (estadio 3 o que requirieron tratamiento). En los análisis de regresión lineal múltiple, la ROP (cualquier gravedad) (β= 1,5 [IC 95%: 0,3, 2,8]) y retinopatía del prematuro grave (β=2,3 [0,1, 4,5]) se asociaron significativamente con la puntuación global de anomalías cerebrales, independientemente de múltiples factores de confusión. En análisis secundarios, la ROP se asoció significativamente con la materia gris cerebelosa y nuclear profunda, pero no con la materia blanca o las anomalías de la materia gris cortical.
En nuestra cohorte regional de lactantes nacidos prematuros, la retinopatía del prematuro, especialmente la retinopatía del prematuro grave, se asoció significativamente con anomalías cerebrales globales a término. Tales anormalidades son probablemente los correlatos estructurales de las deficiencias funcionales posteriores de la visión y el desarrollo neurológico comúnmente atribuidas al diagnóstico de retinopatía del prematuro.